miércoles, 7 de septiembre de 2011

EN RESPUESTA AL COMENTARIO DE ALBERTO, DE MONTEVIDEO



Como sabréis los lectores de este blog, por una entrada anterior, hace un tiempo detecté que no podía hacer comentarios en los blogs de otros compañeros blogueros que sigo, ni responder a los que me hacéis los seguidores del Blog de Centro de Psicología Gestalt.

Así, derrepente (como tienen lugar los insight) he encontrado mi propia solución después de anteriores intentos  para conseguirlo (como buscar solucionarlo técnicamente, pedir ayuda e incluso esperar para ver si era un error de Blogger que pudiera ser solucionado por ellos).
Me he dado cuenta de la posibilidad de dedicar una sección de mi Blog para responder a vuestros comentarios y hacer los propios a otras entradas de  Blogs que resulten de mi interés. Y con esta entrada, inaguro con vosotros esta nueva Sección: RESPUESTA A SEGUIDORES Y BLOGS.

Se abrió una gestalt (mi necesidad de responderos y deciros “estoy aquí, os leo, os tengo en cuenta, y quiero comunicarme con vosotros, necesito responderos). Tras detectar dicha necesidad, busqué en mi entorno, intenté satisfacer dicha necesidad probando con diferentes posibilidades y finalmente he encontrado la que me satisface. He pasado por todo lo que se conoce con diferentes nombres, siendo lo mismo, por las diferentes fases  del ciclo de la experiencia o la curva de contacto (de mi querido maestro Jean Marie Robine). Dicho lo cual, paso a responder a un estimado seguidor.


En respuesta a tu comentario, Alberto, de Montevideo, del 8 de Agosto de 2011, a la siguiente entrada:

"Si te conviertes en amigo de tu hijo le dejarás huérfano de padre/madre"

Hola Alberto:

No hay padres perfectos (ya lo decía Bruno Bettelheim), y lo importante es ser "suficientemente bueno" (como la “madre suficientemente buena” de Donald Winnicott,  que en realidad se refiere a un cuidador o figura de apego referente para un niño), lo que incluye la posibilidad de cometer errores. Y darte cuenta de un error cometido es/te da la oportunidad para subsanarlo.
La tarea de ser padre (o madre) es un camino de aprendizaje, y la capacidad de reflexión (y de darte cuenta) que has mostrado en esta ocasión, estoy segura que te ayudará en las próximas en las que lo necesites.

 ¡¡ Te  deseo que os vaya muy bien  en vuestra relación padre –hijo !!. Gracias por compartir tu experiencia conmigo y con nuestros lectores. Además, comparto contigo, que la lectura de tu comentario ha despertado mi creatividad para solucionar algo que venía tiempo rondándome cómo hacerlo. Las personas podemos aportar a otras (en las relación con ellas), incluso sin ser conscientes de hacerlo, y leerte me ayudó a ver una nueva posibilidad y “abrir mi campo”.


Un abrazo desde España, para ti.  J

Mar

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